MANILA.- Célebre por su predilección por el lujo y su extensa
colección de zapatos y joyas, la ex primera dama de Filipinas Imelda
Marcos cumple hoy 90 años al margen de la vida pública por primera vez
en casi una década y acorralada por varios casos de corrupción.
Más de 30 años después del fin de la "dictadura conyugal" -Ferdinad e
Imelda Marcos gobernaron Filipinas entre 1965 y 1986, ocho de ellos bajo
la ley marcial-, la ex primera dama todavía goza de un fuerte respaldo
popular, lo que le ha permitido labrarse una carrera política en
democracia que terminó hace dos días.
Icono de elegancia, extravagante y considerada una de
las esposas de mandatarios más influyentes y carismáticas en la segunda
mitad del siglo XX, Imelda ocupó varios puestos políticos en Filipinas
tras volver en 1991 del exilio en Hawái -donde falleció su esposo- y
afrontar unos 400 procesos judiciales por el brutal saqueo del país.
Cientos de simpatizantes de los Marcos asistieron este lunes al Parque
Rizal de Manila para celebrar el 90 cumpleaños de la conocida como
"mariposa de hierro", acto al que acudió acompañada de toda su familia,
entre ellos sus hijos Imee y Bongbong, que han tomado el testigo de la
política con buenos resultados.
"Han pasado más de 30
años y todavía sois leales a los Marcos. Mis hijos han sido candidatos a
puestos de liderazgo y en vez de perder apoyos, hemos logrado más. Esta
nación será grande de nuevo", clamó Imelda, a la que aplaudieron,
vitorearon, cantaron "cumpleaños feliz" y regalaron decenas de ramos de
flores.
Después de nueve años como gobernadora de la
región de Ilocos Norte -feudo de los Marcos- Imee, la primogénita de 63
años, acaba de lograr un asiento en el Senado; mientras que su hermano
Bongbong, de 61 años, ya fue senador, estuvo a punto de ser elegido
vicepresidente en las elecciones de 2016 y suena como posible candidato a
la presidencia para 2022.
El mandato de Imelda como
congresista por Ilocos Norte, donde nació su marido, expiró el 30 de
junio, después de nueve años ocupando ese escaño, lo que significa que
dejará la vida pública después de más de una década en el Congreso
-también fue diputada por su natal Leyte de 1995 a 1998-.
La viuda del dictador Ferdinand Marcos (1917-1989) abandona el
Legislativo como la tercera parlamentaria más rica, con un patrimonio
neto declarado en 2018 de más de 18 millones de dólares.
El pasado noviembre, Imelda fue condenada por primera vez por
corrupción al menos a 42 años de cárcel por el desvío de 200 millones de
dólares del erario público a cuentas privadas a su nombre en Suiza
entre 1968 y 1984, cuando era gobernadora de Manila.
La sentencia también la inhabilitó de por vida para desempeñar un cargo
público y, aunque no es firme, la matriarca de los Marcos retiró pocas
semanas después su candidatura a gobernadora de Ilocos Norte -en
sustitución de su hija- para las elecciones de mitad de mandato que se
celebraron en mayo.
La apelación podría demorar años
ese caso en el lento sistema de justicia de Filipinas, ya que esa
sentencia respondía a diez demandas interpuestas por el Defensor del
Pueblo entre 1991 y 1995, por lo que ver a la ex primera dama entre
rejas es tan poco probable como que devuelva el dinero.
La creciente influencia de los Marcos en la vida pública alarma a
amplios sectores de la sociedad filipina, especialmente a víctimas de la
dictadura y defensores de derechos humanos, que no olvidan que durante
la ley marcial (1972-81) al menos 3.240 opositores fueron asesinados,
70.000 encarcelados y 34.000 torturadas.
Además de
las flagrantes violaciones de derechos, los Marcos amasaron una fortuna
ilícita de unos 10.000 millones de dólares y en 1989 entraron en el
Libro Guiness de los Récords por protagonizar "el mayor robo visto
dentro de un Gobierno".
Transparencia Internacional
considera a Ferdinand Marcos como el segundo líder más corrupto de la
historia, solo por detrás del indonesio Suharto.
Cuando en 1986 una revuelta popular pacífica, liderada por Corazón
Aquino, obligó a los Marcos a huir a Hawái, Imelda dejó en el palacio
presidencial de Malacañang 15 abrigos de visón, 508 vestidos, 888 bolsos
y su conocida colección de más de 3.000 pares de zapatos.
"Tengo que lucir bella para que los pobres tengan una estrella a la que
admirar", es una de las frases más célebres de Imelda cuando era
primera dama, para justificar sus visitas a las barriadas de Manila
enfundada en pieles, perlas y oro, mientras la pobreza extrema
desangraba el país.
El gobierno de EEUU documentó que
los Marcos ingresaron en Hawái con millones de dólares en efectivo,
joyas y varios lingotes de oro con la inscripción "A mi esposo en
nuestro 24º aniversario".
A pesar de haber declarado
un patrimonio de 950.000 dólares desde 1965 a 1984, los Marcos
adquirieron más de cien cuadros de pintores como Picasso, Van Gogh o
Monet, valorados entonces en 25 millones de dólares, así como varios
edificios en las mejores avenidas de Nueva York y Beverly Hills.
No hay comentarios:
Publicar un comentario